Hace unos días que el otoño llegó oficialmente al calendario y aunque no lo hemos notado aún en el clima, vamos a aprovechar para recordar como influiría en nuestra conducción y cuáles son esas características que la hacen ser una de las épocas del año más exigentes para las habilidades de los conductores en la carretera.
Tu coche también necesita una puesta a punto para la nueva temporada
Con la llegada de cada nueva estación uno de los primeros puntos que debemos tener en cuenta es hacer un repaso al mantenimiento de nuestro vehículo, especialmente porque volvemos del verano, después de cientos de kilómetros recorridos y con un clima que suele deteriorar más rápidamente algunos elementos de nuestro vehículo.
Uno de los primeros pasos es hacer una limpieza general de nuestro vehículo, de esta forma, eliminaremos restos de arena y sal que si se acumulan pueden provocar oxidaciones y otros problemas en él. Haz lo mismo con el maletero de tu coche, guarda en casa tu kit playero y reorganízalo, repasando que en él no faltan tu rueda de repuesto o kit repara pinchazos, triángulos y chaleco reflectante, que como ya sabemos, son elementos que no deben faltar en un coche.
¿Qué aspectos debemos tener en esta puesta a punto de nuestro coche?
Para esta revisión otoñal serán de vital importancia que prestemos atención a los elementos que aseguran un buen desplazamiento y agarre del vehículo al suelo, así como los relacionados con la visibilidad e iluminación, que nos aseguren poder ver y ser vistos.
Neumáticos
El cuidado mínimo que debemos tener con ellos es verificar que mantienen la profundidad del dibujo, 1,6 mm para ser exactos. El desgaste o una mala alineación son también factores que pueden provocar situaciones de peligro en la carretera.
Limpiaparabrisas
El verano pudo haber maltratado las escobillas, por lo que si observas que están cuarteadas, rotas o hacen ruido cuando las utilizas, es hora de sustituirlas, pues no funcionarán correctamente cuando las necesites.
Por otro lado, es recomendable utilizar un líquido lava lunas homologado que no se congele con la futura bajada de las temperaturas.
Luces
Comprueba su buen funcionamiento y, en otoño, especialmente de los antiniebla, así como de ajustar su altura para evitar deslumbrar a otros conductores.
Luneta térmica
Inclúyela en tu checklist ya que es necesaria para una correcta visibilidad de la parte trasera del vehículo. Sus características evitarán que el vaho te impida ver la parte trasera de la carretera durante tus desplazamientos.
Climatización
No sólo hablamos de su utilidad para ir a una temperatura cómoda en el interior del coche, pues esa utilidad va más allá cuando necesitamos desempañar el parabrisas o los cristales de las ventanas, cuando al entrar o salir del mismo el vaho hace acto de presencia en el vehículo.
Otros aspectos a tener en cuenta
Por supuesto, no está de más que realicemos una revisión de otros aspectos de nuestro vehículo, como pueden ser la suspensión, frenos, batería, filtros y aceite, pues ayudarán a tener el mejor rendimiento de nuestro vehículo en una estación con tanta inestabilidad.
Tenemos que decir adiós al buen tiempo
El otoño puede ser una estación mágica, por la bajada de las temperaturas que nos dan un respiro y las primeras lluvias, con hojas sueltas en las calles que crean escenarios idílicos, pero que deja de ser tan mágica cuando la mezcla de hojas secas y las primeras lluvias vuelven el suelo resbaladizo, o la lluvia da paso a tormentas, y la bajada de la temperatura hace que se instale la niebla en nuestro camino. No dejan de ser nuevos agentes en el entorno que debemos tener en cuenta en nuestra conducción.
Menos horas de luz.
Una de las características más notables de la llegada del otoño. Por lo tanto, utilizaremos las luces de nuestro vehículo con más frecuencia, incluso durante gran parte del día, dependiendo de las condiciones meteorológicas que se vayan dando.
Llega la lluvia…y la niebla.
Son frecuentes las primeras tormentas, incluso de granizo, y que durante parte de nuestro trayecto demos con algunos bancos de niebla. En estas situaciones será cuando pongamos a prueba la puesta a punto que hayamos hecho de nuestro vehículo al empezar la estación.
¡Hojas en la carretera!
Una situación que puede volverse muy peligrosa, sobretodo si están mojadas, ya que al pasar sobre ellas con el coche puede darse un efecto de falta de adherencia parecido al aquaplaning. Mientras vaya avanzando el otoño y las calles y carreteras se vayan despejando, será necesario que extrememos la precaución y reduzcamos la velocidad cuando el suelo esté mojado.
Más exigencia y responsabilidad al conductor
Todos estos cambios en la meteorología nos exigen estar más atentos a la carretera y actuar con la mayor prudencia que podamos, asegurándonos de mantener una velocidad adecuada, así como la distancia de seguridad con otros vehículos, pues son dos factores que nos permitirán actuar con diligencia si nos encontramos con elementos o situaciones adversas durante nuestro trayecto.
Seguramente este repaso a las características de la conducción durante el otoño te han servido ayuda, así que no puedes dejar de compartirlo para que le sea útil a otras personas 😉